La organización Save The Children ha presentado en octubre de 2019 un estudio sobre la importancia del primer ciclo de educación infantil como medio de compensación de las desigualdades socioeconómicas. El estudio se estructura en siete apartados:
1. Un derecho y una oportunidad.
2. La situación.
3. Las barreras.
4. las políticas.
5. Conclusiones.
6. Recomendaciones.
7. ¿Qué hace save the children en educación infantil?La principal conclusión del estudio es que al acceso al primer ciclo de Educación Infantil presenta desigualdades territoriales y económicas en España. Son las clases medias y altas las que acceden mayoritariamente a esta etapa educativa (con una tasa de escolarización del 62,5%), mientras que las más desfavorecidas se quedan fuera (una tasa del 26,3%).
Según la ONG, "para reducir la desigualdad social, al prevenir la repetición, el fracaso y el abandono escolar, que afectan sobre todo a los más vulnerables", es crucial "acabar con la gran brecha social y territorial en el acceso a esta etapa".
La ONG estima que en España deberían crearse 394.000 plazas para universalizar el acceso al primer ciclo de Educación Infantil (p.153); a la vez reflexiona sobre la apuesta por la gratuidad en algunas CCAA, que estaría consolidando una injusticia estructural"cuando la cobertura no alcanza niveles suficientes" (p. 91 y 98).
El coste de la universalización (2.190 millones de euros) contrasta con el dinero que cuesta la repetición de curso (2.800 millones por curso) y el abandono escolar prematuro (17.000 millones al año). Los estudios de Heckman, citados en el informe (p.17), demuestran que la inversión en esta etapa genera una gran "rentabilidad social" con un retorno de cuatro euros de ahorro posterior por cada euro invertido, mucho mayor que la de cualquier otra etapa educativa.
También se analiza el marco legislativo (p. 69) y competencial (p. 73) en el que se desarrolla esta etapa educativa, y su evolución desde los años 90. Dentros de este análisis se aborda el tipo de inicitativa que cubre esta etapa educativa; y dentro de la iniciativa pública aborda aspectos con claras repercusiones sobre la calidad, como el tipo de gestión de las escuelas infantiles públicas (p. 75).
El Apartado 4.8 centrado en la calidad (pp. 129-140) plantea, que para que la educación infantil tenga unos efectos positivos es imprescindible que sea de alta calidad, un planteamiento que en nuestro país se ha subordinado al aumento de la cantidad de plazas, estableciendo unas condiciones estructurales claramente insuficientes
La educación infantil 0-3 de baja calidad puede no tener efectos o incluso perjudicar. Para que tenga los beneficios que hemos analizado, especialmente para los niños y las niñas más desfavorecidos, esta tiene que ser de calidad. La calidad es un elemento crítico. (p.129).Se finaliza con 47 recomendaciones que abordan cinco aspectos (disponibilidad. asequibilidad, accesibilidad flexibilidad/inclusión, integración de servicios y calidad), que puedes leer en el desplegable.
Un ambicioso trabajo que ha contado con la colaboración de expertas como Vicenç Arnaiz, Alicia Alonso, Cristina Elorza así como, entre otros, el Ministerio de Educación y Formación Profesional o las Consejerías de Educación de Andalucía y Madrid.
Algo a mejorar. Un buen índice ayudaría en la exploración del documento y a centrar las ideas clave.
Accede al informe en formato pdf en el enlace. Y a las recomendaciones en el desplegable.